GEWB

Daniel Potes Vargas

OPINIÓN

Tulueños que descuellan Edicion 459

Gustavo Muñoz Saa, crónica de una lucha empresarial
En una ciudad como Tuluá, donde muchas veces se potencia la reputación de personas que no son precisamente icónicas para la comunidad, hay que resaltar la historia mercurial de la villa, desde los turcos que configuraron parte de su comercio hasta los nativos que lo han propulsado. Gustavo Muñoz Saa es uno de ellos. Aunque nacido en Puerto Tejada, Cauca, en 1969, es tan tulueño como la Avenida Cali. Este miembro de la Junta Directiva de la Cámara de Comercio de Tuluá lleva doce años con su empresa Distribuidora JM que provee a mayoristas y particulares en diversas mercancías que van desde papelería hasta algunas drogas de tipo comercial para supermercados y almacenes de cadena. Egresado de la Uceva como contador y bachiller del Gimnasio del Pacífico, Gustavo es un joven comerciante que aporta a Tuluá desde su perspectiva. Por ello, este miembro de la Junta directiva de Fenalco ha sido premiado por su labor de desarrollo en Tuluá.


Francisco Senén Colorado Martínez

Tulueño de cepa, hijo de Francisco Cenén (con C) Colorado Zuluaga y de María Clea Martínez de Colorado es el cuarto entre tres mujeres. Este vivir en un matriarcado lo hizo consentido en la vida. Amante del fútbol, de los deportes y la disciplina, este docente de la Uceva es un estudioso impenitente de los temas gerenciales y administrativos. Ha recorrido medio país en bicicleta y moto. Es experto en Contabilidad Agropecuaria y comenzó sus clases con Néstor Grajales López. Sus hermanas Victoria, Lucero y Miriam son parte de su empresa impresora. Es padre de Victoria Eugenia, de Alicia Fernanda y de Francisco Cenén (otra vez con C), el Jr. Nacido en 1952, Pachito Senén como lo llaman sus amigos, tiene en Diana Carolina, la menor de sus hijas, la más intensa alegría de su vida.