Por: Daniel Potes Vargas.
El nombre Arcadio está muy presente en mi memoria. Arcadio González, revolucionario y tirapiedra del Gimnasio del Pacífico, tenía una joroba donde guardaba propaganda sediciosa. Arcadio el bueno, padre de Ciro González Martínez, (el gran fotógrafo tulueño) por oposición al anterior que era el malo según los rectores, y, por supuesto, Arcadio Buendía, el de la novela mitológica de Gabo. En Buga un poeta lleva su nombre. Hijo de Agustín Macías Cuéllar e Inés Cabal de Macías, quien el próximo 30 de abril cumplirá unos cien años muy lúcidos. El vate vallecaucano nació un 31 de diciembre de 1950, razón por la cual sus allegados le llaman con un apelativo muy afectuoso y familiar. Autor de una obra muy extensa y valiosa, Arcadio Macías Cabal, es docente de Literatura y Español en un prestigioso colegio de Cali. Arcadio es hermano de la abogada Inés Macías y fundador y director de la Revista Ábacos, que orienta la vocación literaria de estudiantes de la capital vallecaucana. Autor de Tierra de lunas y Breviario, entre muchos más libros de poesía; Arcadio, como profesor del colegio Lacordaire, ha gestado la publicación de muchas revistas, entre ellas Cara y sello, de alta calidad editorial y poética y de prosa de reflexión.
Usa silogismos cuánticos para llegar a tratar sus temas. Comenta que si Gabo escribe para que los amigos lo quieran más, él lo hace para confundirlos y estar cada vez más solo. Así podrá escribir con más propiedad sobre la soledad. El gato azul fue otra de las revistas creadas en Cali por este bugueño que estudió Literatura en la Universidad San Buenaventura y es cuñado del ilustre jurista Jorge Vásquez Motoa, que desafió la autoridad omnipotente de Luis Eduardo Arango “Cucaracho”.
Cultivador del verso japonés, del haikú, invitó a poner inspiración creadora a los lectores que hallaron mucho desperdicio de papel en las páginas de uno de sus libros. Quizás el haikú no es una forma poética para todos, así sea un lector de poesía.
Por sus lecturas los conoceréis. Por ello, los autores poéticos que marcaron la actividad lectoral de Arcadio hablan de su calidad. Hernández, Machado y García Lorc,a son como tres grandes planetas de su sistema poético, de sus referentes humanísticos. En una tierra como Buga, plena de grandes valores literarios, desde Cornelio Hispano o Rivera y Garrido, hasta Rogerio Tenorio y Harold Alvarado Tenorio, Arcadio descuella por la cantidad y calidad de sus trabajos de creación poética y sondeo filosófico.